18 de agosto, 2019 / Función única / 3:20 hrs. de duración /
Promotor: TDG Entretenimiento Global.
Alejandro González
Castillo
Fue
a fines de 2015 que, sin que nadie les advirtiera, recibieron la puñalada. Los
agarraron desprevenidos y la daga dio en el pecho: PXNDX, el grupo responsable
del suicidio emocional de miles de chicos con el flequillo cubriéndoles el
rostro, anunció que tomaría un receso. Muchos creyeron que dicho descanso sería
pasajero, pero los días pasaron y José Madero, otrora líder de la banda, no
daba luces de querer regresar a hacer música con Arturo Arredondo, Ricky
Treviño y Kross Vázquez. Parecía que los fans de los autores de Arroz con leche jamás volverían a
escuchar los temas que sonorizaron su debacle anímica en la adolescencia. Así
parecía, hasta hoy.
De
pronto, igual que cuando anunciaron que su grupo se desmembraba, esta noche Arredondo,
Treviño y Vázquez evitan preámbulos y se arrancan con un popurrí integrado
únicamente por éxitos de PXNDX. A buen volumen pasan lista "Si supieras”,
“Ya no jalaba”, Miércoles” y “Disculpa los malos pensamientos”. La cosa sucede
después de que los músicos fingen despedirse y el público solicita su pilón. Y vaya
manera del trío de regresar a escena, pues nadie mantiene las suelas pegadas al
suelo. “Recordar es vivir”, avisa el baterista tras turnarse el micrófono con
sus colegas para llevar a cabo el trabajo que Madero solía desempeñar. Hacía
cuatro años que esas canciones no sonaban de tal forma, por eso la audiencia
agradece el zumbido que generan en los oídos.
Sin
embargo, los de Monterrey no están en el Lunario sólo para traer al cuento
viejos tiempos. En realidad presentan Mexican
dream, el álbum debut de la banda que hoy encarnan: Desierto Drive. El
recién nacido conjunto se halla representado por un par de serpientes
trenzadas, señal de que mudar de piel es sano y que canciones como “Historias
por cambiar” y “Qué fortuna” operan como aire fresco soplando sobre dunas
sonoras. De modo que poco queda de aquel punk risueño que les dio popularidad en
la era de “El chango de los dos plátanos”; “Actriz”, “Ven corazón” y “Flores en
oscuridad”; por ejemplo: lejos de ostentar distorsión machacante, lucen matices
y permiten notar que la influencia de Fobia ha ido más lejos de lo que podría
creerse.
El
trío bromea con parecerse a Sin Bandera cuando apaga sus amplificadores y
empuña guitarras acústicas. Es entonces que el movimiento más intrépido de la
noche toma su turno, con la llegada de guitarrón y vihuela: la exploración del
perfil charro y bohemio de los antes líderes de los emos aztecas. Así, “Buen
día” se asoma como un bolero en regla, con requinto a la Chamín Correa y
armonizaciones vocales estilo Los Panchos. En otro son, “Malinche” resulta una
ranchera que se transforma en heavy metal mientras los lamentos se elevan.
Aunque la que se encumbra como un clásico del rock nacional, lista para abrirse
espacio en bodas y bautizos, resulta ser “Los malaventurados no lloran”, que,
con tratamiento de mariachi, nada le pide a éxitos de estilo similar firmados
por Café Tacvba, Inspector o Caifanes.
“Gracias
chavos, por dedicarnos su domingo, aquí, en nuestra segunda casa”, dice Arturo
al despedirse, echando un vistazo al público para cruzar miradas e intercambiar
saludos con Luis Cortés y el cuarteto Flecha al Aire, los responsables de dar
por inaugurado el maratón dominical con temarios que homenajearon a los Hombres
G y a División Minúscula, respectivamente. ♪
Programa
Ghostwriter
/ Historias por cambiar / Actriz / Pequeño castigo / Ven corazón / Presagios /
Suscríbete a mi canal / Flores en oscuridad / Contigo soñar / Cariño mío / Qué
fortuna / Los malaventurados no lloran / Buen día / Malinche / Político /
Mexican dream / Popurrí PXNDX / Mi chula adolescente / Pesan inviernos.
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