Recuerdos de oro / 31 de mayo, 2019 / Función única /
2:14 h de duración / Promotor: Tr3s Music S. de R.L. de C.V.
Gina Velázquez
Hoy se materializa un sueño de Rocío Banquells: homenajear a una de las
mujeres que más admira desde su juventud: Sonia López. Presenta, con Nueva
Imagen Santanera, Recuerdos de oro (2019),
un tributo a las canciones que hiciera famosas La Chamaca de Oro. Su figura es un referente obligado de la música
tropical mexicana: a los 15 años debutó como vocalista de la Sonora Santanera.
Al grabar Azul (1962), marcó un
parteaguas. Su voz le dio forma a éxitos que ahora forman parte del repertorio colectivo.
Para abrir la cita, el grupo comienza con trepidantes composiciones, preparando
al público, que luce ansioso por escuchar a la cantante. Alternan clásicos de
la música tropical como “Fruto robado”, y boleros legendarios, como “Solamente
una vez”. Cuando Rocío Banquells aparece, las gargantas están entonadas y las
extremidades, listas para bailar.
La cantante y actriz mexicana da la bienvenida a “este túnel del
tiempo”. Se muestra feliz porque el público será el padrino de estos Recuerdos de oro. Con franqueza, afirma:
“No es mi género, pero lo disfruto como si hubiera sido parte de él.” Este gozo
lo imprimirá en todo lo que interprete.
Ésta es también la primera vez en la que Rocío y la agrupación se
presentan solos. Antes habían estado acompañados por Carlos Cuevas, y fue a
partir de esos conciertos que surgió la idea de realizar el álbum. El proyecto
se asentó tras la aceptación que Banquells tuvo con distintos públicos al
incursionar en el género tropical.
Para esta fecha tan especial, estrena un elegante vestido rojo con
encaje negro, inspirado en los que solía usar Sonia López. Este es el único
elemento que tomará de La Chamaca y
es que Rocío no pretende imitarla, ni interpretar de la misma forma las
canciones: las hace suyas estampando el sello histriónico que la caracteriza.
Luego de “Enemigos”, la cantante deja al conjunto para que deleite a
los ansiosos de movimiento. A partir de “Luces de Nueva York”, el Lunario se
convierte en cabaret donde las parejas no dejarán de lucir sus mejores pasos de
baile y los solitarios no se cansarán de danzar con los brazos en el aire.
Edgar Cureño y Marco Reyes, vocalistas de la agrupación, bajan del
escenario para compartir la alegría con los asistentes. Afirman que este grupo,
conformado por diez músicos y fundado por Fernando Olivares, se creó en los noventa
para rendir homenaje al legado de la Sonora Santanera de Carlos Colorado y
acercar a las nuevas generaciones a esta música.
Luego de la locura suscitada por “El mudo”, Banquells regresa con un
imponente vestido dorado y presenta “Laberinto”, uno de sus temas favoritos.
Para interpretar “El ladrón”, probablemente la pieza más célebre en la voz de
Sonia López, invitan a doce mujeres del público para que lleven la voz
cantante.
Para despedirse, Banquells sorprende con versiones inéditas de dos
temas clásicos suyos: “Luna mágica” y “Ese hombre no se toca”, revestidos con
música tropical. Antes de partir, Nueva Imagen Santanera regala un puñado extra
de canciones para que los entusiasmados asistentes renueven la bulla y bailen
un poquito más. Esta noche el viaje por el túnel del tiempo ha sido alborozado
y muestra que en el actual siglo estas canciones mantienen vivo su fuego. ♪
Programa
En un bote de vela / Fruto robado / En tu pelo / Solamente una vez / Con Rocío Banquells: Canela pura - Pena negra - Mi capricho - Corazón
de acero - Enemigos / Luces de Nueva York / Bómboro quiñá quiñá / Perfume de
gardenias / El mudo / Con Rocío Banquells: Laberinto - El nido -
Hechicera - El ladrón - Luna mágica - Ese hombre no se toca / Tita, la más
bonita / Bésame mucho / El botones / Sombrita de cocales / La boa / El
sonsonete.
No hay comentarios:
Publicar un comentario