13 de febrero, 28 de marzo, 23 de agosto, 8 de noviembre, 12 de diciembre, 2019 /
Cinco fechas / 2 h de duración / Promotor: OCESA Promotora S. A. de C.V.
Cinco fechas / 2 h de duración / Promotor: OCESA Promotora S. A. de C.V.
Alejandro
González Castillo
Por
ahí de 1977 solían presentarse en bodas, mercados y bautizos, tocando éxitos de
Rigo Tovar y Acapulco Tropical. Ellos mismos han dicho que en esos bailes
recibían su pago acompañado de un sándwich y una palanqueta. En esa época su
máximo sueño era tener autobús propio con el nombre del grupo escrito en los
costados. Hasta entonces la situación parecía llevar buen ritmo, pero un día
decidieron interpretar sus propias canciones y el trabajo comenzó a escasear.
No fue sencillo salir adelante, pero tenían definida su meta. Era cuestión de
tiempo para que sus composiciones calaran hondo en la audiencia.
Los
Ángeles Azules afirman que la vida les dio una segunda oportunidad. Ocurrió recientemente,
cuando una audiencia acostumbrada a escuchar rock y pop descubrió que el
temario de los de Iztapalapa podía ir más allá de musicalizar las compras en el
tianguis y los viajes en el microbús. De pronto, sin discriminar espacio alguno,
en todas partes se bailaban los éxitos de los autores de “La cumbia coqueta”. Sin
duda, un logro bien merecido por los hermanos Mejía Avante, quienes esta noche
celebran lo que la constancia les otorga: 13 conciertos en el Auditorio
Nacional, siempre con localidades agotadas, ayudados por un repertorio donde
acordeón y trombón, güiro y tarolas, marcan el son del “meneíto”.
La
primera parte del espectáculo está compuesta por piezas donde las percusiones
dominan, tonadas donde cencerros y redobas, congas y toms hacen un llamado a
tomar la calle como pista de baile. Se trata de cumbias creadas para alegrar
los llamados “tíbiris”, esos bailes de barrio que lo mismo eran celebrados en
un gimnasio, una cancha de futbol, un callejón o un salón de fiestas. Jolgorios
hoy recordados por los bailarines anónimos que muestran sus mejores pasos en la
pantalla localizada tras trompetas y teclados. Esto mientras “La cumbia picosa”
o “La cumbia de la tostadita” homenajean a la chicha que a mediados de los
setenta se creaba en Perú. “¡Ámonos con cumbia y sabor!”, exige Elías entre
redobles al tiempo que, a sus espaldas, decenas de músicos van tomando asiento,
hojeando partituras, alistándose para el segundo capítulo.
Belinda
es la primera que toma el micrófono como invitada. Sorprende a la audiencia sin
aviso previo al interpretar “El listón de tu pelo” para que a continuación el
bajista ponga a consideración de los espectadores el acto: “¿Sí les gustó, ¿no?
Está padre, ¿no?”. Se refiere no sólo al desempeño de la chica de “El baile del
sapito”, sino al de la sinfónica que la respalda, un cuerpo de dotados
ejecutantes encargado de otorgar espíritu épico a la historia de esa mujer que
se deshace de la vanidad para perderse en una noche bohemia.
La
audiencia, naturalmente, está contenta con la idea, por eso toma los pasillos
del foro para contonearse a gusto cuando Tessa Ia toma su turno y grita encantada
al aparecer Leonardo de Lozanne entonando “Entrega de amor”. Cabe decir que el
de Fobia no será el único que interprete dos veces el mismo tema ante la
insistencia de los de las butacas; coqueta, Ximena Sariñana hará lo propio con
“Mis sentimientos”.
Mientras
la danza impera, hombres y mujeres se debaten para ver quién grita más fuerte
al tiempo que encarnan una ola descomunal que termina diluyéndose en la costa
que significa el escenario. Además, todos alzan la mano cuando los de los
micrófonos preguntan si quieren más, y lo mismo ocurre cuando se solicita que
las bonitas se manifiesten, aunque cuando se pide que “un gordito suba a bailar”,
ninguno se da por aludido. Prácticamente nadie permanece en su lugar; sin
embargo, los hermanos Mejía fingen sordera cuando claman por un poco de bulla.
“Queremos
ver cómo está el ambiente”, exigen los ataviados de dorado para que la última
del listado aparezca y centenas de parejas den giros, tomadas del hombro y la
cintura, cuestionándose seriamente si temblar de emoción al sentir un abrazo es
algo normal. Uno los ve y parece que bailan despreocupados. En realidad se hacen
una y otra vez la pregunta que un sinnúmero de científicos y filósofos se han
planteado sin encontrar una respuesta certera: ¿que si eso es el amor?, ¿que si
eso es el amor? ♪
Programa
Entrega
de amor / Mi único amor / La cumbia picosa / Toma que toma / La cumbia coqueta
/ La cumbia de la tostadita / Con Belinda:
El listón de tu pelo / Juventud / Veinte rosas para ti / Cómo te voy a olvidar
/ Me haces falta tú / La cumbia del acordeón / Con Tessa Ia: Hermoso bebé / Mi niña mujer / La cumbia del infinito
/ Con Leonardo de Lozanne: Entrega
de amor / Las maravillas de la vida / Mi cantar / Ay amor / Se me perdió la
cadenita / Nunca es suficiente / Con Ximena
Sariñana: Mis sentimientos / 17 años.
Página
oficial de Los Ángeles Azules: www.losangelesazules.com.mx
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